Soportales de Avilés

Soportales de la calle Galiana. ©Miki López 2017
Soportales de Avilés
Muchas generaciones cruzaron estos soportales, guarneciéndose de la eterna calima que dejó de oler a mar cuando llegaron los altos hornos. Pero sus piedras permanecieron impasibles, indiferentes a la espesa atmósfera industrial que oscureció su cielo y sus fachadas. Todo llega y todo pasa en una metamorfosis constante de ese caparazón que la rodea. Sólo ese corazón arqueado permanece indiferente al paso del tiempo